Preparación

Precalentar el horno a 220 ºC (temperatura alta).
En el mortero batir el ajo, la sal, el pimentón y el comino hasta formar una pasta. Finalmente, mezcla el aceite de oliva con la pasta.
En un tazón grande, sazone el pollo descongelado con la pasta de ajo y las especias. Extienda bien el condimento con las manos, para envolver todas las piezas. Espolvoreamos con harina y volvemos a mezclar, el aspecto queda un poco seco y pegajoso, así está. La harina ayuda a formar el caparazón de pollo crujiente sin secar la carne.
Engrase una bandeja para hornear grande con aceite de oliva y distribuya los trozos de pollo, sin amontonarlos; cuanto más espaciados está, más crujiente se pone. Hornee durante unos 20 minutos, o hasta que la base de las piezas esté dorada. Con unas pinzas, voltea las piezas y déjalas asar por otros 20 minutos, hasta que el pollo esté crujiente y dorado.
Mientras tanto, lavar, secar y picar el perejil. Retire la fuente para asar del horno y transfiera los trozos de pollo a un bol con las pinzas. Mezclar el perejil y servir con rodajas de limón.

Ingredientes

  • 1 kg de pollo cortado
  • 3 dientes de ajo
  • 1 cucharadita de comino
  • 1 ½ cucharadita de pimentón dulce
  • 1 cucharadita de sal
  • 3 cucharadas de aceite de oliva
  • ¼ de taza (té) de harina de trigo
  • 3 cucharadas de perejil finamente picado
  • rodajas de limón para servir